martes, 13 de mayo de 2014

D

No quiero escribir más. Siempre que abro la boca la cago. Esto tiene que acabar.

miércoles, 9 de abril de 2014

10 de abril dos

Cuando era pequeño, y empezaba a entender más o menos la vida deseé con fuerzas ser mujer.
Recuerdo que la primera vez que lo hice tendría unos cinco años, y lo que más quería en el mundo era que mi mejor amigo solo tuviera ojos para mi.
Estaba tópica y totalmente enamorado de mi amigo de jardín de infancia.
Muchas veces me han preguntado cuando me di cuenta de que era gay, y la verdad que no es una pregunta que me cueste responder, porque es como si me preguntaran cuando descubrí que mis ojos eran marrones.
Es algo que lleva conmigo desde que nací, y aunque quisiera cambiarlo (que no quiero) no podría.
Otras veces me dicen que yo antes no era gay, y yo siempre respondo riendome, diciendome que no admitirlo no es lo mismo que no serlo.
Por causas que se escapan a mi capacidad de expresion, yo antes no era capaz de reconocerme abiertamente libre para declararme gay con toda la naturalidad del mundo, y es por ello que escondía mi interior de todo aquello que podía derrotarme, sin darme cuenta de que yo mismo les daba las herramientas para luchar contra mi si querian.

10 de Abril

Cuando era pequeño, mi abuelo y otras personas no dejaban de decirme continuamente que estaba en  la edad del pavo.
Yo, tan inocente como siempre lo negaba de primeras, porque miraba a las señoras mayores, que, arrugadas, todo el cuello les caía replegado y a mi me recordaba a aquellos capitulos de los simpsons en el que aparecía un pavo muy bien caracterizado, y a ellas las denominaba yo las "mujeres en la edad del pavo".
Por eso, y por otras razones negaba continuamente estar en la edad del pavo; porque para mi, eso era algo más que un cambio fisico o un sintoma psiquico. Para mi, la edad del pavo era crecer, y eso era algo por lo que no quería pasar jamás jamás.

sábado, 15 de marzo de 2014

15 de Marzo.

Cuando mi estado de ánimo se veía mermado, o simplemente dejaba de ser tan reluciente, me daba por comer.
Siempre que estaba ansioso, deprimido, o simplemente aburrido, cogía lo primero que pillaba y tragaba.
Aquella tarde no fue menos.

domingo, 12 de enero de 2014

13 de Enero, 2014.

Año nuevo, aunque las inquietudes anteriores no han cesado.
Después de estar dandole vueltas a la cabeza durante más de media hora, y de escuchar mil y una canciones que me ayuden a evadirme, me has desvelado.
Y has sido tú sin querer. Y yo estaba en el duermevela del sueño, intentando conciliarlo, y ahí llegaste tú y poblaste mi mente nuevamente.
y yo y mi manía de tener una semana con las defensas bajas, y a cada cosa que me decías más mi mente empezaba a volar y más mis ojos se empañaban.
Tus ultimas palabras, un "te amo" y un "muchisimo". Y yo no pude más responder que con un simple "Y yo" seguido de un "mañana hablamos".
Porqué? porque la mente se me estaba nublando, y antes de perder la cabeza mientras hablaba contigo, prefería quedar de borde.
y porque precisamente el porqué era lo que ocupaba todo mi pensamiento en ese momento.
PORQUÉ? Qué hice mal? Y me refiero a esa conversación que mantuvimos esa noche del 28 de Diciembre. Sé que te dije que lo había superado, y te juro que me he esforzado y que no te he mentido, que lo creía superado.
Pero, a cada día que pasa, a cada paso que doy, más vuelven los fantasmas a mi cabeza, y más me atormenta todo.
te quiero, me quieres, entonces? Porqué? Qué mueve a que hagas eso?
No lo sé. Me he documentado, intenté leer testimonions de casos parecidos para ser capaz de comprender; y, al final de todo, no lo he sido.
Te quiero como si no hubieran días más allá de ti, pero tú?
Tú, oh, tu. Sólo tú sabes lo que piensas cuando cierras los ojos.